El Tema

Otra vez me veo defendiendo posturas en las que no creo por entender que se está “cargando sin medida” contra cierta persona, situación y/o comportamiento…

Por estar cansada de escuchar a algunas personas emitir juicios de opinión, como si ésta fuera ley, la única verdad, menospreciando y/o denigrando a las personas que simplemente no piensan como ellos…

Porqué me asombra la manipulación que determinadas personas y/o colectivos emplean para argumentar que algo “está bien” o “está mal” …

Porqué estoy en contra de la corriente que existe y que nos trata de imponer un pensamiento único, tratándonos de convencer de que solo hay una verdad, que solo “unos” son buenos y que “los otros” son malos, pero que muy malos, que esto es “lo correcto” y lo diferente, “lo incorrecto” …

Porque a veces tengo la sensación de que los políticos (de todos los colores), en lugar de centrarse en hacer las cosas bien, aplicando el interés general, busca polarizarnos para desviar la atención de los problemas generados tras la incapacidad para gestionar, de una manera honesta, justa y eficiente, las diferentes situaciones a las que, como sociedad, debemos enfrentarnos. Y este hecho me da rabia, porque creo que “de tú a tú” somos capaces de entendernos, de ayudarnos, de ser solidarios y toda esta nebulosa que se genera, en situaciones, es demasiado tóxica y puede llegar a influir en la manera en que efectiva e individualmente nos relacionamos.

Porqué hay más que “una verdad única”, porque cuando justo se está tratando de dar voz a la Diversidad, más que nunca, hay que estar abierto a escuchar, a respetar, a reflexionar sobre otras realidades, que por el mero hecho de no ser las nuestras no significa que sean “malas” y/o “incorrectas”.

Porqué hay que trabajar en tener un espíritu crítico que nos haga cuestionarlo todo para poder desarrollar nuestra propia opinión, con criterio, sin comprar ideas que nos hacen creer propias y que, sin darnos cuenta, nos están tratando de imponer.

Supongo que ya sabréis de lo que os vengo a hablar hoy…

He de deciros que, como personaje público, no simpatizo con esta señora. Creo que ha transmitido, a lo largo de su trayectoria profesional, una imagen superficial, forzada y peliculera, que me ha dado un poco de grima pero... tampoco puedo negaros que empaticé con ella durante la enfermedad de su hijo y que me impactó profundamente su muerte. Aún sigo sin hacerme la idea de todo el sufrimiento que esta desgracia tan grande le ha podido suponer a esta señora porque tengo el convencimiento de que, aunque puedas seguir viviendo, de la muerte de un hijo nadie se puede recuperar. Desde que fui madre, entendí otra dimensión de la Naturaleza y esto, sencillamente, es antinatural.

No voy a entrar a opinar sobre la gestación subrogada porque realmente soy incapaz de posicionarme claramente a favor de una postura o la otra; creo que entiendo muy bien ambas, porque hay demasiadas implicaciones morales que me impiden mantenerme en una sola posición fija.

Donde sí creo tener una posición más clara es en relación a la edad deseable para ser madre. Si bien hay factores importantes que nos obligan a ser madres más tarde de lo idealmente deseado (inestabilidad laboral, encontrar a la persona adecuada con la que tener un proyecto de vida en común…), mi experiencia personal me ha hecho posicionarme del lado de la Naturaleza, y son dos las razones básicas: el desgaste físico que supone ser madre es innegable y, si bien mis hijos se han beneficiado de la madurez que me han dado los años, la realidad es que el trasiego físico que supone tener hijos, sería más manejable con la energía propia de la juventud, según mi experiencia. Mi segundo argumento es que los niños necesitan mucho amor, pero también acompañamiento (real); necesitan una familia que les cuide y les quiera, y no solo durante los primeros años de vida. Son indudables todos los avances que están habiendo en la medicina y que cada vez vivimos más años, con mejor calidad de vida pero… ¿ser madre soltera a los 68 años, es la mejor opción de futuro para un bebé? Probablemente no.

Lo que no me gustan son las “trampas” en los argumentos:

Con respecto al aborto, entiendo perfectamente que hay situaciones en las que debe prevalecer el bienestar de la madre por encima de todo lo demás…pero no entiendo que, para este caso, se utilice el argumento de que las mujeres somos dueñas de nuestro cuerpo y no respeten esta misma libertad para las mujeres que deciden gestar el bebé de otra familia….para posicionarse en contra del comportamiento de esta señora, se ha utilizado el argumento del bienestar y futuro del bebé, y entonces…¿este argumento no debería ser valorado, también, en caso de que una madre quisiera abortar?

Últimamente parece que ha cobrado mucha fuerza el término de Sororidad, y la idea de que las mujeres deben apoyarse entre mujeres, haciendo alusión a qué entre nosotras, en ocasiones, somos muy críticas y que justo porque compartimos mucho, deberíamos ser más comprensivas… ¿Quién no comparte esta posición?...¿Cómo puede ser posible entonces que ahora, todos en tromba, incluidas mujeres, hayan entrado a destrozar, sin miramientos, a esta mujer cuando no es la primera persona conocida que ha tomado esta decisión?…¿por qué? ¿por qué es mujer? ¿conocida? ¿rica?

“No a la subrogación porque supone la instrumentalización de la mujer”… realmente me parece triste que una mujer tenga que considerar la opción de gestar un bebé como la única manera de obtener un ingreso y por tanto un sustento...pero ¿es esta mujer la primera persona que ha sido madre mediante gestación subrogada?... ¿en serio no conocemos los nombres de otros señores y señoras que lo han sido? ¿Hemos hablado de estas situaciones empleando el mismo tono como se ha hecho con esta mujer?...¿el problema es que lo haya hecho esta señora o que esto se de? ¿está bien regulado? ¿se protegen y garantizan los derechos tanto de la madre gestante como de la madre no gestante?

Hablamos de qué “somos víctimas de una sociedad patriarcal” y resulta que para que se produzca un embarazo hacen falta un hombre y una mujer, pero solo estamos poniendo el foco en el papel y/o responsabilidad de la mujer durante este proceso… ¿no hay mercantilización con el semen, imprescindible para fecundar a una mujer? ¿Dónde está el debate sobre el papel del hombre en el proceso de gestación subrogada?

Se habla de que la maternidad no es un derecho, es un deseo y creo que tiene mucha verdad esta afirmación, pero… ¿nos hemos planteado la frustración y tristeza que puede suponer para una pareja llena de amor el hecho de no tener familia y estarían deseosos y capacitados para educar a personas de bien?... ¿nadie se cuestiona la cantidad de hijos que llegan a este mundo fruto de relaciones entre adultos inmaduros e irresponsables, no capacitados para tener descendencia y las consecuencias negativas y el futuro devastador que esto puede suponer para estos niños? … ¿estamos legitimando la capacidad para ser padres por el mero hecho de poderlo ser naturalmente y despreciando a las personas que desean serlo y no pueden?

Efectivamente, ojalá priorizar la adopción de niños en situación de desamparo, pero ¿realmente el sistema facilita una gestión ágil y eficiente para dar un hogar a estos pobres niños?

¿Pretende ser esto una reflexión absoluta sobre el tema? Rotundamente no.

Solo quiero invitar a reflexionar internamente sobre cómo, a veces, emitimos juicios de valor sin ser conscientes de todas las contradicciones que suponen nuestros argumentos, del desconocimiento que podemos tener sobre el tema, de la historia que hay detrás de cada uno de nosotros, de las mochilas que cada uno cargamos, de los motivos que llevan a una persona comportarse de determinada manera.

Que deberíamos reflexionar sobre cómo pueden impactar nuestras opiniones a los demás y más, cuando hablamos con la certeza inconsciente que nos hace creer que sabríamos como actuaríamos si nosotros nos viéramos inmersos en la misma situación, cuando la realidad es que no tendríamos ni puñetera idea de cómo ésta nos afectaría ni como reaccionaríamos hasta que no estuviéramos llevando esos mismos zapatos.

Ahí lo dejo.

No sabía el gusto que me daría volver 😉

Besos

B.B.